domingo, 1 de diciembre de 2013

La felicidad y el pensamiento

¿Qué relación hay entre el pensamiento racional y la felicidad?
La ignorancia hace feliz a la gente, o eso dicen. ¿Pero realmente es más feliz quien cree en mitos?
Aquellos que no buscan una explicación lógica a los hechos se ahorran el plantearse si lo que creen es cierto o no. La ciencia a veces destruye creencias que son importantes para la gente. Por poner un ejemplo, ¿a quién le iba a sentar bien oír que la Tierra no era el centro del Universo en la Edad Media? Aquellos que creían fuertemente en el geocentrismo serían infelices al conocer la realidad. 
Pero depende del deseo de saber de cada individuo. Habría varios casos, ya que si los principios chocan con los descubrimientos, puede haber un conflicto. Pongamos el caso de Darwin, que era religioso y creería en la Creación, y a medida que veía que los animales que investigaba compartían características comunes que daban lugar a la teoría de la evolución, sus creencias perdían sentido, y seguramente se sintió infeliz.
Pero si el pensamiento racional nos descubre una verdad que ansiamos conocer, quizá seremos más felices que quienes no reflexionan por sí mismos. Por ejemplo: Einstein pasó años buscando la ecuación que hiciera comprender mejor el universo, y cuando la encontró y enunció la teoría de la Relatividad, supongo que debió sentir felicidad.

Yo elijo ser feliz buscando el conocimiento, no aceptando ideas que no entiendo porque vivir ignorando puede dar la felicidad, pero un tipo de felicidad en la que no usamos nuestra principal característica humana: el pensamiento racional.

Estudiar... ¿para qué?

Lo primero es admitir para qué estudiamos todos: para sacar buenas notas o, al menos, aprobar. Eso es común a cualquier estudiante, aunque existan otros intereses a parte de los puramente pragmáticos.
Por poner un ejemplo: nadie va a aprenderse 4 temas de memoria de cualquier asignatura por placer. El sistema educativo nos enseña que para obtener buenos resultados nos basta con memorizar para el examen, y cuando acaba, podemos olvidarlo todo. A fuerza de llevar tantos años memorizando, perdemos el interés por el estudio.
No digo que no haya que memorizar, ni que no funcione para nada, pero creo que mayormente es una pérdida de tiempo y de esfuerzo. Deberíamos hacer más ejercicios de reflexión para entender el temario por nosotros mismos.
Supongo que muchos de los estudiantes (por lo menos los de Bachillerato) estudiamos no sólo para aprobar, sino para conocer más, porque aquí estamos para seguir estudiando unos cuantos años más, y hemos elegido este camino por nuestra cuenta (casi todos).
Tal vez me equivoco y la mayoría de estudiantes de Bachillerato buscamos las buenas notas para tener buena media en Selectividad, estudiar la carrera que queramos y conseguir dinero. (Qué horror pasar unos 20 años estudiando sin que desees obtener conocimiento).
Personalmente, no sé qué quiero estudiar, así que de momento no tengo una meta clara de para qué estoy haciendo Bachillerato. Quien lo tenga claro podrá contestar con seguridad que está estudiando para ser médico, arquitecto, traductor... Pero yo estoy estudiando para... estudiar.
¡Estúpido Wert!

Independentismo Catalán

Oímos y vemos constantemente en los medios de comunicación que Cataluña desea independizarse.
Desde el resto de España  a veces lo vemos sin sentido. Es lógico, porque la mayoría no conocemos sus intereses ni motivos puesto que tenemos otro punto de vista.
No comparto los planteamientos nacionalistas. Considero que el nacionalismo es dañino, porque nos separa. Aunque estemos hablando de un caso en el que no hay violencia de por medio, nos fragmentamos cada vez más, limitamos más fronteras para lo que consideramos nuestro. Otros dirán que identificarse con la patria en la que has nacido es bueno, porque es tu sitio, donde te has educado y formas parte de él. Pero no me parece bien que el lugar en el que hayamos nacido nos determine como personas. Yo defendería que más que luchar por un territorio propio, lucháramos por nuestros derechos. Y los políticos saben muy bien que el sentimiento nacionalista nos distrae de temas más importantes. 
¿Pero cuál es el punto de vista de los catalanes independentistas? Quieren independizarse por considerarse una región fuera de España con historia, lengua y cultura diferentes. También desean la independencia porque creen que formando parte de España, no progresarán económicamente como lo harían si fueran un país. 
Por eso debemos respetar su elección, ya que las naciones deberían estar en su libre derecho a unirse o separarse si consideran que forman parte de un mismo Estado.
Por lo tanto, lo justo sería apoyar el voto de Cataluña por encima de los intereses individuales.

sábado, 8 de junio de 2013

Crítica a la clase de ética

La clase de ética tiene diferentes aspectos: contenidos, forma de dar la clase, respeto, forma de evaluar y exámenes.
Las demás asignaturas se suelen enseñar con otros métodos más comunes. Pero ésta tiene uno más original. Cuando no sabía lo que era ética me imaginaba que iba a ser una asignatura más... innecesaria, o aburrida. Pero ahora que acaba el curso veo que es necesaria, y no estoy de acuerdo con que el gobierno no la considere dentro de su programa y quiera eliminarla, mientras da preferencia a la religión haciéndola contar como nota, y haciendo que el sistema educativo no sea laico e igual para todos, ya que quieres comparten unas creencias personales pueden obtener más nota que el resto.
¿Que por qué me ha parecido importante? Porque no es como educación para la ciudadanía, que únicamente era aprender datos de memoria. Ética ayuda a plantearse las cosas, supongo que es algo previo a la filosofía, y me parece de gran importancia ya que ayuda a entender el mundo desarrollando las ideas de cada uno y no mediante las que nos inculquen. Porque algunas personas saben plantearse las cosas que les presentan como verdaderas, gracias a la educación que reciban en sus casas o porque son observadores y analizan, pero otros van a aceptar todo lo que se les diga, van a ser gobernados por personas que los engañan, y no van a poder cambiar las cosas a mejor.
La forma de dar la clase es original porque llama la atención, y se atiende mejor con historias que ejemplifican la teoría, ya que se recuerdan mucho mejor que si simplemente hay que estudiar textos de memoria. Además, que se dé la clase con sentido del humor es más llevadero que si se hace sin entusiasmo. También, el respeto es importante, porque muchos profesores son demasiado blandos y dejan que sus alumnos pasen por encima de ellos, y otros son demasiado estrictos y en vez de imponer respeto dan miedo. En la primera clase, cuando el profesor dijo que podía dar la clase bien o por las malas, pensé que era estricto. Pero tiene un sistema un tanto curioso de hacer que todos estemos callados. ¿Cómo hace una simple raya en la pizarra que nos callemos todos? Para muchos significará que se comportan para aprobar pero es una forma de demostrar respeto, por lo menos para mí.
La forma de evaluar me parece algo estricta, ya que no se cuentan las décimas y si tienes un 7'95 te quedas con el 7. Creo que debería ser más flexible en eso. Pero de igual modo me parece bien la idea de mandar un blog a los alumnos para poder expresar las opiniones propias y poder así subir nota.
En conclusión, esta clase me parece importante y más llevadera que la mayoría. Le doy un 9.

sábado, 27 de abril de 2013

La felicidad
Es algo abstracto, y depende de cada uno de nosotros.
Si algo es común a todos, es que somos felices cuando nos sentimos realizados, cuando nos sentimos bien con quienes somos.
¿Sabemos realmente cuándo somos felices? Puede que confundamos sensaciones con la felicidad.
El consumismo hace que creamos que comprando cosas y más cosas vamos a sentirnos bien.
Otra gente se tortura y no se permite ser feliz. ¿Ser feliz es una opción? porque las condiciones no son iguales para todos.
Además, muchos pueden ser felices y no pararse a pensar en ello. La felicidad puede ser la ignorancia.
Buscamos muchas cosas de nuestra vida, de los demás, de lo que nos rodea. Tal vez no nos damos cuenta de que ser felices lo decidimos nosotros, según la actitud que adoptemos.
A veces nos hundimos pensando en lo que nos falta en vez de cambiarlo. Las personas damos mucha importancia a cosas absurdas. Nos preocupamos demasiado por lo que piensen los demás, dificultando todo. Ser feliz sería tan sencillo como luchar por lo que queremos. Creo que no es tan importante el fin, si adoptamos de forma positiva el camino. Los objetivos no son tan importantes como vivir el momento. Puede que no lleguemos, simplemente porque no queremos. Porque pensamos tanto en qué hacer para conseguir ser felices que se nos olvida...
Hacer las cosas más sencillas, apreciar a quien nos quiere, perseguir las metas, actuar, en vez de observar y lamentarse, y aunque no nos guste lo que tenemos que hacer, encontrar motivación y aceptar que no todo puede ser tal como quisiéramos.

domingo, 3 de marzo de 2013

Im

Im se despertó.  Iba a ser un día muy largo, contando con que en Tdea el día constaba de 38 horas terrestres y 34 minutos. Su superior le había dicho que la toma de contacto con el planeta Nkads (que significaba agua, habían llamado así a la Tierra) era inminente, por lo que debía estar preparada para la expedición. Ella estudiaba los lenguajes en las diferentes zonas con vida inteligente en la Vía Láctea, y por eso, había sido elegida para la expedición. Nkads era el primer planeta que encontraban con condiciones compatibles para la vida de los Tdeax.
Por los medios de comunicación, solo se hablaba de lo fantástico que era haber encontrado un lugar donde establecer contacto y tal vez compartirlo con extratdeax. Pero Im sospechaba que, debajo de toda esa propaganda, había intención de aprovecharse de Nkads.
Le informaron de que en dos días iban a partir hacia Nkads. Ella iría con otros 50 miembros de tripulación… técnicos, investigadores, militares, científicos… pero ella sería la encargada de la comunicación. Habían estado observando a los Nkadx y sabían que vivían en sociedad y que poseían conocimientos y tecnología, sin embargo, desconocían si había vida en otros planetas, por lo que su reacción era imprevisible.
Im tenía miedo. No podía negarse a ir, pero no quería participar. Ella siempre había vivido tranquilamente sin plantearse cómo habían sido las expediciones anteriores. Se había limitado a estudiar y creer, desde la escuela, las clases de historia, en las que se hablaba de la bondad y la generosidad de los Tdeax, hasta llegar a su puesto de trabajo y empezar a servir al gobierno.
Sin embargo, empezaba a dudar. Sospechaba que en otros viajes, se habían cometido guerras y se habían explotado otros planetas y sometido a su población.
En el fondo, sabía que había llegado el momento de cambiar las cosas, de tomar partido. Se pasó toda la noche pensando, sobre todo lo que seguramente le habían ocultado.
Ese día, habló ante el mundo y les explicó que no debían confiar en todo lo que se les decía. Les convenció de que no permitieran la invasión de otros pueblos.
Im murió. No se sabe cómo, solo por qué. Porque era una amenaza para el gobierno, pero aunque acabaran con su vida, sus ideales se transmitieron al pueblo.

Nota: El valor moral es la libertad. Se ve cuando Im se plantea todo lo que cree y decide arriesgarse.

sábado, 2 de febrero de 2013

¿Las culturas son iguales? ¿Hay que respetar todas las tradiciones?

Las culturas son diferentes, en religiones, tradiciones y valores morales.
Debemos lograr una convivencia en la que ninguno salga dañado manteniendo las culturas.
En cuanto a respetar tradiciones, se deberían apoyar todas aquellas que no perjudiquen a nadie.
No hay que respetar las tradiciones que se basen en la discriminación, la explotación,  pues si lo hiciéramos la sociedad no progresaría- La tortura, "abolida", si la respetáramos, seguiría presente en nuestra vida, y si consideramos que como es una tradición, hay que mantenerla, nunca podremos acabar con ella. La tauromaquia, que es defendida por ser una tradición, es el asesinato de animales. ¿Realmente hay que respetar matar animales por diversión? No.
Hace unas semanas, la profesora de Sociales nos hizo una pregunta: ¿Qué os parecería si viniese una nueva alumna  musulmana que llevara burka? En clase hubo varias opiniones: unos dijeron que la respetarían y la tratarían como a una más, y que no les importaba mientras ella no lo llevara porque la obligasen. Otros dijeron que debería ir vestida como nosotros, ya que en su país las mujeres estaríamos obligadas a llevar burka.
Si lo llevara, seguramente se sentiría diferente, apartada de los demás. Si le obligáramos a quitárselo, tampoco se sentiría bien consigo misma ni con su cultura. Por lo tanto, ¿qué debemos hacer? ayudar a que elija libremente, aunque no nos guste su decisión. Ahí es cuando llega el respeto.
Porque, si yo tuviera que ir a vivir a un país donde el nudismo fuera lo normal, me sentiría diferente al ir vestida, pero tampoco me sentiría bien si me obligaran a ir desnuda. Preferiría que respetaran mi decisión. 
En conclusión, para respetar a los demás, tal vez deberíamos ponernos más en el lugar del otro y dejar de mirar por nosotros mismos y lo que la sociedad nos ha enseñado.